sábado, 1 de septiembre de 2018

Pizza cuatro quesos

Hace muchísimo que no escribía una receta nueva, pero voy a intentar empezar con la rutina del blog, que es algo que me gusta y me divierte bastante. Para empezar otra temporada, he hecho una pizza de cuatro quesos, que para mí es una de las mejoras pizzas, aunque para gusto.... las pizzas ;)


Yo he elegido cuatro quesos porque soy una amante de los quesos, pero ya sabéis que el secreto está en la masa, así que podéis poner lo que queráis luego en la pizza o si elegís quesos, podéis echar los que más os gusten. Os aconsejo echar mozzarella fresca cuando la pizza salga del horno, para darle un toque de queso más, y la rúcula, a esta pizza le va que ni pintado, si no habéis probado pizza con rúcula, deberíais hacerlo pronto.


Para hacer la pizza yo utilizo una piedra de horno, que hace función de falso horno de piedra, ya que se calienta la piedra mucho y hace que se quede una masa crujiente en poco tiempo, y para que no se pegue la pizza en la piedra o en el horno, echo un poco de semolina. Pero si no tenéis piedra no pasa nada, una rato más en el horno, y listo ;)




La receta de la masa da para dos pizzas familiares, si os gustan finitas.

Pizza cuatro quesos:
Para la masa:
400 gr harina de fuerza ( si no tenéis, podéis hacerla con harina normal)
1 cucharada azúcar moreno
1 cucharada aceite de oliva
1 cucharadita rasa de sal
250 ml de agua tibia
25 gr de levadura fresca de panadero

En un bol echamos la harina, el azúcar y la sal, mezclamos bien. Añadimos la levadura, deshaciéndola con los dedos. Por último echamos el agua y el aceite de oliva. Mezclamos bien con ayuda de una cuchara o lengua. Cuando estén todos los ingredientes mezclados, sacamos la masa del cuenco y amasamos con las manos hasta que quede una masa uniforme, sin grumos. (si tenéis máquina de amasar, pues mejor, pero si no, con las manos se puede perfectamente).  Echamos un chorrito de aceite en el cuenco, metemos la masa y tapamos con un paño, dejamos que repose hasta que haya doblado su tamaño.


Para el relleno:
3 cucharadas de tomate frito
Queso mozzarella rallado
Queso azul
Queso de cabra
Queso mozzarella fresco
1/2 cebolla morada
Rúcula

Precalentamos el horno, con la piedra (si la tenemos) a 250ºC.
Dividimos la masa de pizza en dos ( o las pizzas que queráis vosotros) y con ayuda de un rodillo hacemos nuestra pizza. Echamos semolina sobre la pala de horno (si la vais a hacer en la piedra, si no, podéis echar semolina directamente en la bandeja del horno) ponemos la pizza y montamos. Echamos el tomate, el queso moszarella rallado, el queso azul, el de cabra y la cebolla picada. Metemos al horno hasta que tengamos una base dorada.
Cuando salga del horno, echamos el queso mozzarella fresco en taquitos. Según vayamos comiendo, vamos echando rúcula, para que no se cocine con el calor de la pizza. Y lista para disfrutar, esta pizza no defrauda, de verdad que os va a enamorar si sois amantes del queso.