El queso que utilizan es "queso duro" así lo llama mi amiga venezolana. Aquí, en Noruega, es bastante difícil de encontrar, a veces lo hay y a veces no, así que cuando probé el queso duro, mi primer pesamiento fue "está salaete" y luego me vino a la cabeza el queso feta. Así que he hecho mi versión de los tequeños de queso venezolanos.
Los he rellenado con queso feta y de acompañamiento he hecho una mermelada de pimientos de piquillo con chilis, para darle ese contraste que tanto me gusta de dulce y salado.
Los tequeños están riquísimos, la masa en la que va enrollado el queso es crujiente y luego al morderlo tienes el queso feta jugoso y calentito, es imposible comerse sólo uno.
Lo bueno es que puedes hacer tequeños para un regimiento, congelarlos, y cada vez que te apetezcan, que en mi caso es bastante a menudo, los fríes directamente sacados del congelador y listo.
De verdad que están increíblemente buenos, y si queréis podéis rellenarlos con queso manchego curado, o con queso de oveja, os recomiendo que sea un queso fuerte, para que haya más contraste.
Aquí os dejo la receta de este aperitivo, tapa o acompañante venezolano.
Ingredientes para 24 tequeños:
200 gr. de harina
40 gr. de mantequilla
1/2 cucharadita de sal
1 cucharadita de azúcar
1 huevo
50 ml de agua
300 gr de queso feta en bloque
Mezclamos la harina con la sal y el azúcar. Añadimos la mantequilla en cuadraditos, y mezclamos con las manos (hasta que parezca arenilla la masa). Añadimos el huevo batido y mezclamos otra vez con las manos, cuando el huevo esté integrado echamos el agua y a mover, al principio con una cuchara, para que no nos pringemos mucho, y luego ya metemos las manos.
Una vez hecha la masa, la estiramos muy bien, que quede finita. Cortamos tiras de unos 2 centímetro de ancho, da igual el largo, y reservamos.
Cortamos el bloque de queso feta en tacos bastante grandecitos, aunque eso ya va en gustos, podeís hacer un super tequeño o un mini tequeño.
Enrolláis la masa alrededor del queso y un tequeño menos, así hasta 24, se tarda poco.
Un vez hechos, los podéis congelar o freírlos a fuego medio-fuerte (150º C en la freidora)
Para la mermelada de pimientos y chiles:
150gr de pimientos de piquillo en lata (Si no tenéis este tipo de pimientos, podéis asar pimientos rojos en el horno)
El caldo de los pimientos o agua (35 ml apróximadamente)
1-2 chiles rojos (si no queréis que pique, no los echéis)
6 cucharadas de azúcar
Picáis los pimientos y los chiles, se ponen en un cazo con el caldo de los pimiento y el azúcar y a cocer a fuego medio, tarda unos 30 minutos una vez que rompe a hervir la mezcla. Se sabe que está lista cuando cambia ligeramente de color y no queda caldo casi.
Batimos bien con la batidora y ya tenemos la mermelada. Ahora a mojar los tequeños en ella, aunque esta mermelada también está muy rica con queso de cabra en rulo al horno.
Y ya sabéis, si tenéis alguna duda o hacéis esta receta escribirme a: angelambpa@gmail.com
Aaayyy Ángelaaa!!!... Cuánto voy a aprender contigo!! Sólo necesito ponerlo en práctica... Y tener tu arte, claro!
ResponderEliminarBesote, Isa
Una receta completamente desconocida para mí, pero con muy buena pinta.
ResponderEliminarNo obstante, voy a proponer algo. ¿Por qué no hacerla con un buen queso manchego? Seguro que el resultado no deja a nadie indiferente.
Muchos éxitos.